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Hoy es el último día de viaje para Marta y el inicio de mi aventura en solitario. Marta vuelve a España y yo me voy a Taipei (Taiwán), aunque volveré a Manila el día 19 para seguir mi recorrido por Filipinas.
El día ha amanecido lluvioso y tras el desayuno hemos salido de nuevo con paraguas y chubasquero para ir a Fort Santiago. Una fortaleza que construyeron los soldados españoles para proteger la ciudad en Intramuros.
Es un sitio interesante, la verdad es que nos ha costado llegar porque con la lluvia resultaba difícil consultar el GPS del móvil y nos hemos confundido, pero nos ha servido también para andar un poco más.
Teníamos previsto ir a Binondo (Chinatown), pero el tiempo hacía muy incómoda la vista al cementerio chino que era uno de los objetivos de la visita de Manila. Cuando vuelva a Manila iré porque es un cementerio muy particular. Ya lo contaré cuando vea con mis propios ojos lo que he visto en algún reportaje y leído sobre este singular punto de la ciudad.
Allí nos ha caído un buen chaparrón y nos hemos protegido bajo el arco de la entrada a la Plaza de Armas. Apenas ha durado unos 20 minutos y ya no volvería a llover hasta la hora de irnos al aeropuerto.
Hemos vuelto caminando por las viejas calles coloniales y hemos tomado un café en la misma cafetería de ayer para programar lo que sería el resto del día.
Nos hemos decidido por la zona de Malate, Ermita y Paco. No hemos tenido suerte con nuestra primera visita, el Philippine Kim Luan Temple, un templo taoísta chino que tenía hoy cerradas sus puertas, así que nos hemos dedicado a pasear por sus calles y hemos comido en otro enorme centro comercial, el Robinson's Place.
Rotonda de Remedios, centro neurálgico del popular barrio
A las 5 y media hemos pedido ya el taxi para ir a el aeropuerto, aunque hoy es Domingo y hay mucho menos tráfico, en esta ciudad no puedes arriesgarte porque puedes quedarte en un atasco en cualquier momento. En poco más de 40 minutos y tras pagar 6 euros al taxista (incluida la propina), hemos accedido a la Terminal Internacional y hemos ido a facturar en primer lugar el vuelo de Marta que debía salir a las 21,00.
Mi vuelo para Taipei debía salir a las 22,00 y también estaba retrasado, por lo que he podido estar con ella hasta el momento de su embarque. Finalmente mi vuelo ha salido a las 23,15. Sabré si Marta ha podido coger el suyo en cuanto aterrice en Taiwán.
Lo de Taiwán lo pensé anteayer. Conseguí un vuelo barato y está solo a dos horas en avión desde Manila. Marta quería ir a alguna isla y redujimos los días en el Norte de Luzón para ir a Bohol y Cebú a los que yo tenía previsto ir cuando Marta volviera a España, así que cambio esos días para dar un salto a este Estado que en realidad no lo es porque es parte de la República Popular China.
Lo de Taiwán lo pensé anteayer. Conseguí un vuelo barato y está solo a dos horas en avión desde Manila. Marta quería ir a alguna isla y redujimos los días en el Norte de Luzón para ir a Bohol y Cebú a los que yo tenía previsto ir cuando Marta volviera a España, así que cambio esos días para dar un salto a este Estado que en realidad no lo es porque es parte de la República Popular China.
Marta embarcando
En cuanto aterrizo en Taipei, recibo el mensaje de Marta de que ha perdido el enlace. Le han dado vuelo para mañana a la misma hora y le han llevado a un hotel donde estará esta noche y mañana. Está un poco nerviosa porque es algo nuevo para ella, pero luego sólo será una anécdota más de este viaje. Al cabo de media hora ya estaba feliz como una perdiz.
Yo por mi parte he cambiado algo de dinero y he reservado una habitación para mañana. Las tiendas del aeropuerto están cerradas y no puedo comprar una tarjeta SIM. Como no quiero que Marta tenga problemas para comunicarse conmigo, me quedo de momento en el aeropuerto.
Yo por mi parte he cambiado algo de dinero y he reservado una habitación para mañana. Las tiendas del aeropuerto están cerradas y no puedo comprar una tarjeta SIM. Como no quiero que Marta tenga problemas para comunicarse conmigo, me quedo de momento en el aeropuerto.
A las 3,30 cojo un autobús para el centro de la ciudad y mañana ya veremos.
Consigo habitación a las 5 de la mañana, asi que me voy a dormir un ratillo.
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